Los tres salieron ricos. Los tres se cagaron en la gente. Los tres se rodearon de lujos e hicieron gastos ostentosos mientras le hacían creer a la gente que eran "santos".
Lo de Sai Baba, vaya y pase, al final de cuentas sólo se cagó en los boludos que lo siguieron, pero lo de los Schoklender es ya una vergüenza que ni 6-7-8 puede tapar. Ignorar sí, porque para eso le pagan.
Hacerse los boludos les sale más que bien.
Pablo y Sergio Shoklender, quería pedirles que se vayan bien a la concha de su madre, que sus hijos/as, nietos/nietas vivan avergonzados de su apellido y que mueran solos en la mayor de las pobrezas junto a los que cagaron. ¡¡Les deseo mucha tristeza y mala fortuna, por ser tan pero tan hijos de puta!!
¡Schoklender, otro apellido para agregar al lista de apellidos de los hijos de puta!
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